(El comunicado original en PDF lo encuentras al final de este texto)
En el mismo espíritu y con las mismas irrenunciables premisas del comunicado emitido el pasado 14 de marzo, ante las disposiciones emanadas de las autoridades civiles competentes –particularmente del gobernador del departamento y de los alcaldes municipales–, por el cuidado del don por excelencia que es la vida y por el bien de la salud de todos, después de escuchar al Colegio de Consultores, les hago conocer a todos estas nuevas disposiciones y recomendaciones.
- A partir del 18 de marzo, todos los templos y lugares de culto o de reuniones formativas permanecerán cerrados hasta tanto las autoridades civiles nos comuniquen que han cambiado las circunstancias que dieron origen a sus respectivas disposiciones.
- Las eucaristías que los feligreses ya hubieren separado en las parroquias, las bodas y las exequias se celebrarán a puerta cerrada con la asistencia únicamente del núcleo familiar más cercano, y observando estrictamente todos los protocolos dados a conocer por las autoridades sanitarias.
- Los sacerdotes y un estrecho grupo de sus colaboradores más cercanos que puedan facilitar su ayuda buscarán la manera de mantenerse en permanente y cercano contacto con los fieles de sus parroquias, especialmente con las familias, y, mediante los responsables de sector y los equipos de comunicación que se tengan, u otros que se vayan organizando, a través de las redes sociales los harán diariamente partícipes de la palabra de Dios, de la oración y de la celebración de la eucaristía, y valiéndose de la homilía, de la catequesis y de otros tipos de mensajes y subsidios ayudarán a las familias a mantenerse unidas y solidarias.
- Las oficinas de la Diócesis, para dar testimonio de conducta razonable y solidaria, tienen ya su propio protocolo de procedimiento para cuidar de los trabajadores de la curia y acatar las disposiciones de las autoridades civiles al respecto. Eso mismo espero de los despachos de las parroquias.
- Reitero que los santuarios diocesanos, particularmente el de San Benito Abad, aplazaron sus respectivas peregrinaciones y fiestas hasta después de que pase esta emergencia; por eso, no se recibirán peregrinaciones mientras tanto. Las rogativas y súplicas que los católicos van a hacer por la humanidad en esta circunstancia no pueden ser en manifestaciones de ese tipo, dado el riesgo que entrañan para la propagación de la virosis que tratamos de contener.
- Apelando a la fuerza interior que nos infunde el Espíritu Santo, podemos y debemos hacer de esta emergencia una magnífica oportunidad pastoral que ayude a los sacerdotes a crecer en identidad sacerdotal y caridad pastoral y a nuestros fieles a crecer en comunión fraterna y en solidaridad social.
- Oportunamente, y según vayan evolucionando los acontecimientos, estaré dando a conocer nuevas instrucciones, especialmente para las celebraciones de la Semana Santa.
Con mi oración por todos y mi bendición para todos,
Sincelejo, 18 de marzo de 2020.
Original firmado
+José Clavijo Méndez
Obispo de Sincelejo
Comunicado Nº2 del obispo diocesano de Sincelejo-17/02/2020 by Diócesis de Sincelejo on Scribd