La Campaña de Cuaresma (o Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes), que se celebra anualmente hace 36 años, tiene como objetivo fomentar una cultura solidaria y caritativa en los colombianos con el fin de realizar donaciones para ayudar a los hermanos más necesitados.
Antecedentes
La campaña nació por iniciativa de la Iglesia Católica Colombiana, previo a la Semana Santa de 1982 con el objeto de recaudar fondos para atender las necesidades ante emergencias por desastres naturales y el desplazamiento forzado, fortaleciendo a su vez el compromiso cristiano con la construcción de una sociedad solidaria.
El primer gran apoyo que Cáritas colombiana pudo ofrecer gracias a la colecta, fue tras el terremoto que vivió Popayán en 1983. En esta ocasión con los recursos obtenidos con la primera colecta nacional, logró ayudar a los damnificados en la rehabilitación y reconstrucción de la ciudad, además de la entrega de medicinas y elementos de primera necesidad para las familias afectadas. La experiencia se repitió pronto con la avalancha que sepultó a la ciudad de Armero producida por el volcán nevado del Ruiz en 1985.
En el 2017 se orientó prioritariamente a atender las necesidades de los damnificados por las avalanchas en Mocoa. Además, se ha brindado ayuda humanitaria a familias afectadas por las inundaciones, avalanchas, condición de desplazamiento y migrantes, con una cobertura de 4312 familias, 19.220 personas, por un valor de 1.231.642.970 en todo el país.