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Los pastores, personas cuya dignidad fue reivindicada por el Señor, son representados por niños. Fotos: cortesía de Luis Guillermo Castillo.

En el municipio de Sincé está el santuario mariano más visitado de la Diócesis de Sincelejo, el de la Natividad de la Santísima Virgen María.

Y cada tiempo de Adviento, espera paciente del Salvador, son muchas las familias católicas que prestan sus casas y representan pasajes bíblicos referentes a la vida del Señor.

Lo hacen en una calle entera, con la bendición de la Iglesia (en una ocasión de monseñor José Clavijo Méndez, obispo de Sincelejo), y en lo que los participantes han denominado el pesebre más grande de Sincé (y tal vez de Sucre).

Católicos y no católicos valoran esta actividad con contenido pastoral y evangelizador que cultiva la disposición espiritual para vivir el misterio del nacimiento de Jesús.

El pesebre más grande no distingue de credos, por eso, en la cuidadosa representación de los pasajes se ve el trabajo de diseñadores, carpinteros, pintores y actores naturales.

Muchos son los visitantes que hallan en esta expresión de fe otro motivo para peregrinar, dos meses después de la fiesta de la Niña María.